Dios no solo abre caminos, también te enseña a caminar sobre las aguas!!

Imagen
A veces le pedimos a Dios que quite los problemas, que nos abra un camino donde no lo hay, que nos rescate de lo que duele. Pero hay momentos en los que Él no lo hace así… porque quiere enseñarnos algo más grande, a mantenernos firmes aun cuando todo parece hundirse. Caminar sobre las aguas no significa no tener miedo, significa confiar en medio del miedo. Es cuando las olas son altas y el viento es fuerte, pero aún así decides creer. Dios no siempre calma la tormenta de inmediato, muchas veces quiere mostrarte que, con fe, puedes atravesarla sin hundirte. Quizás no se trata de que se abran nuevas puertas, sino de aprender a caminar con fe sobre aquello que antes te hacía temblar. Porque mientras confíes, no habrá agua profunda que te hunda, ni viento fuerte que te derribe. ¿Y si esta vez Dios no quiere abrirte un camino, sino enseñarte a caminar sobre lo imposible?

El Dios de Segundas Oportunidades

                           Resultado de imagen para arbol creciendo en tierra arida"


En Jonás 3:1, vemos que la palabra del Señor viene a Jonás por segunda vez, y que no es diferente de la primera (registrada en Jonás 1:2). Dios le dice que vaya a Nínive y predique a sus habitantes. Dios le da a Jonás una segunda oportunidad.
No importa cuánto hayamos rehuido las instrucciones de Dios, seguirán estando allí para que las cumplamos cuando paremos de correr. En última instancia, veremos que estar en la voluntad de Dios, no fuera de ella, es lo que nos da paz y gozo. Debemos rendirle nuestras voluntades, porque andar en nuestros caminos autocentrados nos hará ser infelices.
Escapar de las cosas difíciles nunca da resultado a la larga. Conocí a una mujer que huía de todo lo que fuera difícil en su vida. Ignoraba cosas con las que era necesario que tratara, incluido el abuso en su hogar. Vivía temiendo y tenía una vida miserable. Terminó acarreando tanta confusión, que tuvo un completo quiebre mental y emocional. Pretender que sus problemas no existían no hizo que se fueran. Seguían estando allí, presionándola todo el tiempo. Dios trató de guiarla a ocuparse de sus conflictos, pero ella no confió en Él suficientemente como para hacerlo.
Dios nunca nos llevará adonde no pueda cuidarnos. Si Dios lo está guiando a tratar con una situación desagradable de su vida, no huya de ella. Él promete estar con usted en todo momento y no dejarlo ni abandonarlo nunca. Rendirse a Dios puede parecer alarmante cuando recién comenzamos a practicarlo porque no sabemos lo que va a pasar cuando nos entreguemos a la voluntad de Dios. Sin embargo, una vez que nos hemos rendido y comenzamos a experimentar la fidelidad de Dios y la paz que sobrepasa todo entendimiento, aprendemos rápidamente que los caminos de Dios son mejores que cualquier plan que nosotros pudiéramos haber ideado.
No conocemos exactamente lo que sucederá en el futuro, pero confiar en que Dios cuidará de nosotros y disfrutaremos de paz es mucho mejor que pensar erróneamente que tenemos todo resuelto en la vida mientras seguimos viviendo con temor y ansiedad. Disfrutando de paz con Dios llegaremos a estar más satisfechos, aunque no siempre sepamos lo que el futuro nos deparará.
No existe confianza sin preguntas no respondidas. Si Dios nos está dirigiendo a hacer algo difícil, simplemente comencemos a dar pasitos de fe de bebé, y después de cada uno Él nos mostrará cómo dar el próximo. No es necesario que tengamos el plano completo del futuro; no necesitamos tener todas las respuestas. Todo cuanto necesitamos es conocer a quien las conoce, y ése es el propio Jesús.

Tomado de La Biblia de la vida diaria, de Joyce Meyer

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Libro en PDF// El Poder de la Esposa que Ora // Haga CLICK en el libro para descargar Gratis