Dios no solo abre caminos, también te enseña a caminar sobre las aguas!!

Imagen
A veces le pedimos a Dios que quite los problemas, que nos abra un camino donde no lo hay, que nos rescate de lo que duele. Pero hay momentos en los que Él no lo hace así… porque quiere enseñarnos algo más grande, a mantenernos firmes aun cuando todo parece hundirse. Caminar sobre las aguas no significa no tener miedo, significa confiar en medio del miedo. Es cuando las olas son altas y el viento es fuerte, pero aún así decides creer. Dios no siempre calma la tormenta de inmediato, muchas veces quiere mostrarte que, con fe, puedes atravesarla sin hundirte. Quizás no se trata de que se abran nuevas puertas, sino de aprender a caminar con fe sobre aquello que antes te hacía temblar. Porque mientras confíes, no habrá agua profunda que te hunda, ni viento fuerte que te derribe. ¿Y si esta vez Dios no quiere abrirte un camino, sino enseñarte a caminar sobre lo imposible?

Tiempo Devocional// "Santificacion"



 Julio 22
Santificación
"La voluntad de Dios es vuestra santificación", 1Ts_4:3


El lado de la muerte. Al santificarnos, Dios tiene que tratar con nosotros tanto en el lado de la muerte como en el de la vida. El exige que vayamos al sitio de muerte, pero como muchos de nosotros pasamos tanto tiempo allí, nos volvemos lúgubres y pesimistas. Siempre hay una dura batalla antes de la santificación, algo dentro de nosotros que siempre se resiste y se resiente ante las demandas de Cristo. La lucha comienza tan pronto el Espíritu Santo empieza a mostrarnos lo que significa ser santificados. Jesús dijo: "Si alguno viene a mí, y no aborrece... su propia vida, no puede ser mi discípulo", Luc_14:26. 

En el proceso de santificación el Espíritu de Dios me despojará de todo, hasta que no quede sino "yo mismo". Ese es el lugar de muerte ¿Estoy dispuesto a ser "yo mismo" y nada más? ¿Dispuesto a no tener ningún amigo, padre, hermano, ni interés personal y listo para morir? Esa es la condición necesaria para la santificación. No es de extrañar que Jesús dijera: "No he venido a traer paz, sino espada", Mat_10:34. Es aquí donde luchamos y muchos de nosotros desmayamos. Rehusamos identificarnos con la muerte de Jesucristo en este sentido. Decimos: "¡Pero es tan duro! De seguro Él no quiere que yo lo haga". Nuestro Señor es estricto y sí quiere que lo hagamos. 

¿Estoy dispuesto a reducirme a lo más simple de mi condición como persona? ¿Estoy decidido a despojarme de todo lo que mis amigos piensan de mí y de todo lo que pienso de mí mismo? ¿Estoy dispuesto y decidido a entregarle a Dios mi yo desnudo? Tan pronto lo esté, Él me santificará por completo y mi vida se liberará de cualquier determinación y persistencia que no sea Dios mismo. 
Cuando ore: "Señor, muéstrame qué significa la santificación para mí", Él me responderá: "significa ser hecho uno con Jesús". La santificación no es algo que Jesucristo me da, es Él mismo en mi (ver 1Co_1:30). 

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Libro en PDF// El Poder de la Esposa que Ora // Haga CLICK en el libro para descargar Gratis